La fórmula NOCTURNOS se puso en marcha hace ahora 18 años, alcanzando una saludable mayoría de edad y consolidándose como un clásico de la oferta cultural del Museo. Nació con el objetivo de acercar la historia de Tenerife al público local de una forma distinta a la visita. Se diseñó entonces un espectáculo sencillo, sin mucha “pirotecnia” que, enfatizando la proximidad y la participación de los asistentes, pretendía hacer llegar de una forma entretenida episodios del pasado elegidos para cada ocasión y aderezados con cuentos y con música, en un combinado de disciplinas que se dan la mano para instruir y divertir. La ocasión la brindaban las estaciones del año.
Pronto ofrecimos la oportunidad al público de escoger los temas a tratar, en el sano ejercicio de democratizar el proceso cultural y siendo consecuentes con uno de los principios que inspiraron esta acción cuando se puso en marcha. Se activa entonces LA HUCHA DE IDEAS y de ahí salieron las voces de los otros y no solo la de nosotros, a la hora de preparar las estaciones siguientes. Muchos asistentes se convierten entonces en usuarios y repiten visita.
Con el tiempo sofisticamos la actividad, incorporando piezas de las colecciones que ilustraran el tema elegido y que estuvieran guardadas en el almacén (y por tanto lejos de la vista pública), enriqueciendo la experiencia y favoreciendo el hacerlas accesibles.
Desde entonces hemos contado y cantado, estación tras estación, historias del panorama insular sobre la emigración, la esclavitud, volcanes, científicos o viajeras ilustres, ataques piráticos, los oficios, … La longevidad de esta actividad confirma que, sin duda, es posible desencadenar las potencialidades emotivas del Patrimonio y que la distancia con lo que a priori puede ser un gran desconocido o un pequeño aburrido museo de historia, se acorta.